En el embarazo el control de peso es clave, es realmente importante tener cuidado con lo que comemos y la cantidad que comemos, porque aunque comamos para dos, no debemos comer el doble. El hecho de engordar demasiado pueden poner en riesgo tanto a la mamá como al bebé que está en camino.
Un truquillo que da muy buen resultado es comer más despacio. De esta manera tu estómago tendrá tiempo de enviar la señal a tu cabeza de que ya estás saciada. Me pasa bastante, que cuando como muy deprisa, al terminar de comer estoy más llena de la cuenta, y entonces…ya es muy tarde para solucionarlo.
No te saltes ninguna comida. Es mejor comer poca cantidad y a menudo, que pegarte un atracón. Además te sentará muchísimo peor estando embarazada.
No dejes de comer cosas que te apetezcan muchísimo, pero todo con moderación. Es mejor que tomes un poquito a no tomar nada, ya que la necesidad se hará más fuerte.
No compres patatas fritas, o golosinas. La mejor manera de evitar comer alimentos no saludables, es no tenerlos a mano.
Y lo mejor de todo, haz ejercicio, moderado, da paseos, no te dejes llevar por la pereza. Salvo que tu médico te diga que lo tienes contraindicado. Recuerda, siempre lo que diga el médico en primer lugar.
Y vosotros, ¿controláis el peso durante el embarazo?